A la hora de hacer una reforma integral de tu piso tienes que pensar en qué quieres cambiar. Lo primero que debes tener en cuenta es la planificación. ¿Qué quieres cambiar? ¿Qué habitaciones mantendrás? ¿Cuáles ampliarás? ¿Qué materiales utilizarás en cada zona? La planificación es lo primero y, a partir de ahí, debes tener en cuenta los siguientes consejos.
Recomendaciones para hacer la reforma integral
La primera recomendación es que pienses en lo que quieres. Cuando comentas en tu entorno que vas a realizar una reforma en tu vivienda vas a recibir opiniones para todos los gustos. Nosotros hemos llegado a recomendar comentar lo menos posible este tipo de cambios. En muchas ocasiones, las opiniones de los demás lían más que ayudan. Necesitas tener ideas buenas y claras, para que los profesionales puedan ejecutar la reforma de tu casa de forma adecuada. Por lo tanto, una cuestión importante es que pidas opiniones sólo a personas de tu entorno en las que confíes plenamente.
La segunda recomendación antes de ponernos manos a la obra (nunca mejor dicho) es que dibujes tu casa a vista de pájaro. No importa que no tengas conocimientos técnicos. Simplemente dibuja cuál quieres que sea la próxima distribución de tu vivienda, visto desde arriba. Te ayudará a programar mentalmente lo que necesitas. De las medidas exactas y de los temas más complejos ya nos encargamos nosotros. Sin embargo, este ejercicio ayuda a que el propietario aclare sus ideas, y sepa trasladarlas a los operarios con facilidad. La transmisión de mensajes claros es otra de las claves para una buena reforma de un piso.
En tercer lugar, establece un presupuesto para saber cuál es tu límite. Tienes que repartir bien el dinero en todos los aspectos de la casa, pero sin dejar nada de lado. Hay zonas más caras que otras y algunas necesitan más atención, pero tienes que pensar en todo y acomodar el presupuesto a todas las áreas.
Por último, contrata a profesionales cualificados y con experiencia. Esto te puede salir más o menos económico, pero es importante que no hagan chapuzas y que sean dedicados en su trabajo. El acabado tiene que ser el requerido. Si no, no tiene sentido reformar la casa.